Pinot Noir
Mis relaciones con el vino francés han sido durante años de amor-odio.En mi familia siemrpe existió una tradición vinícola de buen conocimiento del vino español y una admiración a distancia por el vino francés. Digo a distancia porque, aunque Francia está a veinte minutos en cose de mi ciudad, mi aita era un represaliado de la dictadura franquista que no dispuso de pasaporte durante más de 30 años.
Yo crecí creyendo la propaganda francesa de que el mejor vino del mundo era el francés y cuando fui autónomo económicamente visité vinaterías francesas como 'Nicolas' y los surtidos supermercados. Aquí empezaron mis descepciones. Para empezar las denominaciones francesas son una trampa para osos donde es difícil distinguir lo bueno de lo mediocre. El sistema está parcelado por un conjunto de pequeños pueblos de la denominación. Es como si bajo la denominación Rioja tuviéramos un montón de denominaciones como "Haro", Laguardia" o "San Vicente". Además, cuando sólo pone denominación Burdeos o Borgoña el vino es generalmente de menor calidad que si pone "Margaux" o "Cote d'Or". Así cuando veía un vino etiquetado "Burdeaux Superieur" y otro etiquetado "Pomerol" creía que solo el primero era Burdeos. Pronto me di cuenta de que los vinos buenos franceses eran muy caros comparados con los vinos españoles de igual calidad. Las mayores decepciones en relación calidad precio siempre me las he llevado con los Burdeos. Quizás porque cuando empecé con los borgoña ya conocía un poco el laberinto de vinos franceses y porque mi encuentro con la uva Pinot Noir borgoñesa fue un amor a primer olfato. En mi opinión no hay mejor vino en el mundo dentro de lo que he probado y puedo asegurar que he probado mucho, que un buen Pinot Noir borgoñés. Estoy hablando de un vino con un precio aproximado de 18 euros. Luego hay auténticas maravillas pero son otros precios y otros niveles de referencia a lo que este blog no hace referencia. Es cierto que 18 euros no es barato pero lo vale, sobre todo si se compara con algunos vinos españoles pretendidamente de alta expresión de 40 euros o más.
La cata de este mes es de un vino Pinot Noir borgoñés. El Pinot Noir es una uva extremadamente exigente muy difícil de asentarse con éxito en otros lugares. Mientras el Cabernet Sauvignon ha demostrado adaptarse con éxito a otros 'terroir' o climas, ninguna región ha desarrollado vinos Pinot Noir con unas características atractivas. Así pues, si se decide a probar un Pinot Noir decídase por un Borgoña y deje de lado las imitaciones californianas o latinoamericanas.
El Domaine Chanzy de denominación Mercurey presenta un color rubí oscuro y brillante. Es un vino fino, armónico y que ofrece un aroma amplio a arándanos y a cerezas, mezclado con discretos aromas espaciados de su breve paso por madera. Un paladar envolvente con deliciosos taninos que hacen un sabor cautivador y con un bien definido final a fruta y pimiento.
Mercurey Les Carabys 2009
Yo crecí creyendo la propaganda francesa de que el mejor vino del mundo era el francés y cuando fui autónomo económicamente visité vinaterías francesas como 'Nicolas' y los surtidos supermercados. Aquí empezaron mis descepciones. Para empezar las denominaciones francesas son una trampa para osos donde es difícil distinguir lo bueno de lo mediocre. El sistema está parcelado por un conjunto de pequeños pueblos de la denominación. Es como si bajo la denominación Rioja tuviéramos un montón de denominaciones como "Haro", Laguardia" o "San Vicente". Además, cuando sólo pone denominación Burdeos o Borgoña el vino es generalmente de menor calidad que si pone "Margaux" o "Cote d'Or". Así cuando veía un vino etiquetado "Burdeaux Superieur" y otro etiquetado "Pomerol" creía que solo el primero era Burdeos. Pronto me di cuenta de que los vinos buenos franceses eran muy caros comparados con los vinos españoles de igual calidad. Las mayores decepciones en relación calidad precio siempre me las he llevado con los Burdeos. Quizás porque cuando empecé con los borgoña ya conocía un poco el laberinto de vinos franceses y porque mi encuentro con la uva Pinot Noir borgoñesa fue un amor a primer olfato. En mi opinión no hay mejor vino en el mundo dentro de lo que he probado y puedo asegurar que he probado mucho, que un buen Pinot Noir borgoñés. Estoy hablando de un vino con un precio aproximado de 18 euros. Luego hay auténticas maravillas pero son otros precios y otros niveles de referencia a lo que este blog no hace referencia. Es cierto que 18 euros no es barato pero lo vale, sobre todo si se compara con algunos vinos españoles pretendidamente de alta expresión de 40 euros o más.
La cata de este mes es de un vino Pinot Noir borgoñés. El Pinot Noir es una uva extremadamente exigente muy difícil de asentarse con éxito en otros lugares. Mientras el Cabernet Sauvignon ha demostrado adaptarse con éxito a otros 'terroir' o climas, ninguna región ha desarrollado vinos Pinot Noir con unas características atractivas. Así pues, si se decide a probar un Pinot Noir decídase por un Borgoña y deje de lado las imitaciones californianas o latinoamericanas.
El Domaine Chanzy de denominación Mercurey presenta un color rubí oscuro y brillante. Es un vino fino, armónico y que ofrece un aroma amplio a arándanos y a cerezas, mezclado con discretos aromas espaciados de su breve paso por madera. Un paladar envolvente con deliciosos taninos que hacen un sabor cautivador y con un bien definido final a fruta y pimiento.
Mercurey Les Carabys 2009
- Domaine Chancy (Gran Vin de Bourgogne)
- Uva: Pinot Noir
- Crianza: 12 meses
- Precio en tienda: 18 euros. Se puede encontrar en la magnéfica tienda de vinos Eguiazabal situada al pasar el puente de Hendaya hacia Francia
- Nota : 10
- Relación calidad-precio: El goce hace olvidar el precio
